Tomarse algo

URB_0915b

Tengo a Chipirón negro algo olvidada. Ella me lo recrimina: «Oye, Garbanzo negro, qué pasa: ¿sólo me vas a sacar cuando te diga alguna idea para tu entrada número 300? Te metes en armarios, te introduces en el insomnio y no sales… Si algo conozco por tus entradas (y veo que ya hay algunos que te van catando), todo en estas palabras es más real de lo que parece, más real de lo que tú mismo te crees». Ella me habló en uno de sus comentarios privados -es cierto- de los armarios como símbolos de nuestro mundo, basándose en una entrada que escribí hace tiempo. Y también es cierto que me ha aportado alguna observación interesante sobre el miedo, la angustia y sus consecuencias. Ahora ha pasado del lado de la contundencia en un correo que decía solamente: «Te lo digo muy en serio: tienes que tomarte algo». A mí -lo digo ahora- me pareció que traspasaba la barrera del comentario para pasarse a la del consejo, y no sé si eso es bueno o malo. Pero también ha seguido con las ficciones, como cuando habla de In Treatment, una serie que también ha aparecido en Verba volant. En efecto, me ha dado una genial idea que estoy desarrollando para la entrada que me comenta (faltan casi quince días para la conmemoración). No voy a chafar la sorpresa, pero adelanto algo: «¿Por qué no haces una entrada en conversación contra-contigo mismo? Será una batalla desigual. Seguro que tú, que eres tan listo, no sales ganando. Tienes el talento del ganador, pero paseas tus derrotas». Bueno, que me enrollo: a lo que iba. Ese «Tienes que tomarte algo» me desconcertó, pero el desconcierto tardó menos de un día. Al  siguiente, tuve otro correo que decía: «Sí, no te extrañes. Te lo sigo diciendo muy en serio, Garbanzo negro. Hay veces que uno quiere salir de todo y -como tú dices- no sale de nada menos de su vida. Te lo repito muy en serio: tienes que tomarte algo. Algo que te ayude con las penas y los pesares . Y yo tengo tu antídoto. Por ejemplo, puedes tomarte un respiro». Ha dicho. Amén.

8 comentarios en “Tomarse algo”

  1. Nos lo sacas fuera del contexto, porque realmente la frase es así: "Tienes que tomarte algo… conmigo" (con ella)

    Es una clara invitación a algo no definido,

    sus tentáculos de sepia dan miedo…

    Lo del diálogo-monólogo tiene buena pinta

  2. Eso de tomarte algo…. que quieres que te diga NO ME GUSTA. Así se empieza, querido Raúl, "tomándote algo"… ¡¿QUÉ?! vamos a ver, no creo que sea una leche caliente con miel (que sería lo más sano) NO, tiene que ser algo químico que te va a trastornar más de lo que ya estás… Bueno, tu haz lo que quieras que ya eres mayorcito… Besotes, M.

  3. Hay borracheras que merecen la pena, son auténticas catarsis. Al día siguiente hay un sentimiento más de renacimiento que de resaca. Prueba a cogerte una buena,,,

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.