Despertar en el infierno

Hace ya unos cuantos días, publiqué una entrada titulada Desmayo en el cielo en la que mostraba mi voluntad firme y serena de no querer despertarme nunca más en el caso de que volviese a perder el conocimiento. No me pasa lo mismo cuando me meto en la cama, apago la luz e intento dormir. … Leer más

Desmayo en el cielo

Hace unos cuantos años, en el más amplio vacío de un paseo por el campo, sentí un ligero mareo inicial del que no guardo más recuerdo que sus consecuencias: un cuerpo desperezándose mojado de rocío, con una herida en la frente que destilaba sangre. No sé si ocurre en todos los casos, pero en mis … Leer más

A través del espejo… y lo que encontramos al otro lado

Nunca hemos contemplado nuestro rostro directamente: sólo lo conocemos a través de los reflejos y las imágenes, lo que es lo mismo que decir que nos conocemos a nosotros mismos viendo algo que no somos. Jacques Lacan (y otros psicoanalistas) denominaba a este fenómeno el estadio del espejo. Esta puñetera paradoja hace que, mientras nos … Leer más

El reflejo de la contradicción

Escribo “Miércoles”. Pero es (casi) sábado. Deseaba mentir, crear un estado de ánimo. También escribo “El ilustrado contar de los viejos rebeldes”. Pero lo cierto es que estoy en mi casa, delante del artefacto electrónico, y que sólo escucho la voz de los vecinos, siempre ruidosos. Miento y escribo. Y a la vez hablo. “La … Leer más

Ni una palabra

El torrente de significados catapultó al escritor a ese mundo donde la materia se desvanece entre la niebla del Arte. Mira, lector profundo, las heces de la letra devoran los blancos espacios. Sólo un murmullo fresco de ese viento fecundo, sólo un leve susurro de la espuma que fecundó la ola. Ahora mi mano se … Leer más

Velos

Nadie busque coherencias, nadie verdades. Mi ser es la ignorancia relativa de los velos que ocultan la mitad de los rostros apagados.

Laberintos ¿Qué laberinto?

  -¡Qué hermoso es el mundo y qué feos son los laberintos! -dije aliviado. -¡Qué hermoso sería el mundo si existiese una regla para orientarse en los laberintos! -respondió mi maestro. Son palabras de una conversación mantenida entre Adso y Guillermo de Baskerville, tras su primera incursión en el laberinto de El nombre de la … Leer más