DI
DI. Este ha sido el lacónico mensaje que, hace unos días, me envió mi ignota Chipirón negro. Lacónico y redundante, pensé. Porque las palabras, y más cuando son voladoras, dicen. Por si mismas o –mejor– por el sujeto que se acurruca después, dotándolas de significados. Luego le di alguna vuelta de más, porque sus mensajes … Leer más